La página web El Cooperante publica de manera exclusiva una continuación de la masacre ocurrida el martes en horas de la noche en el municipio Arismendi del estado Sucre, donde ocho personas perdieron la vida, según la información inicial.

El Cooperante contactó  a habitantes de la comunidad, quienes detallaron, bajo condición de anonimato, que todo se trató de un ajuste de cuentas ligado al narcotráfico. Y su principal responsable sería «la gente de Vicmar Marín».

«En la madrugada del martes en un establecimiento de fiesta en El Morro ingresaron hombres fuertemente armados. Primero, dispararon a un transformador dejando sin luz a la comunidad e ingresaron al centro hípico, disparando contra las personas que se encontraban festejando en el lugar. Se habla de cinco personas muertas y varios heridos», expresó la fuente vía telefónica.

«Hasta el momento se sabe que unos entraron por mar en bote y otros por tierra en un carro. Pero nadie sabe la marca o el color».

«La información que se maneja entre quienes vivimos aquí es que fueron sicarios a los que les ordenaron matar a algunos de los que estaban celebrando en ese centro hípico. Sabían bien por quién iban. Pero también, murió una juez de La Guaira que es madre de un efectivo policial del estado Anzoátegui. Estaban todos en esa fiesta, pero la muerte de la jueza la están tapando para que no salga a la luz pública», aseguró.

La fuente destacó que alias «Gabo» sería el hombre al que estaban buscando los sicarios.

«Vicmar Marín está detrás de esto. Los asesinos iban por el Gabo y la juez. En los medios de comunicación está circulando la foto de una muchacha que tiene cabello color amarillo, pero ella no estaba en la tasca. Murió esa misma noche pero de cáncer. Todo lo hacen para tapar la verdad de lo que pasó».
 

Vicmar Marín fue detenido por efectivos de la Dirección de Contrainteligencia Militar, el mes pasado. Se encontraba junto al inspector jefe del Cicpc, José Mujica. Marín estaba solicitado por el tribunal 21 de control de Caracas.

«A Vicmar lo agarraron preso hace unas semanas, es conocido por ser el jefe máximo de la mafia en El Morro. Gabo ocupó su lugar y por eso, lo mandaron a matar. Hubo tantos muertos porque la gente del Gabo respondió al ataque, pero él no está muerto, logró escapar y resguardarse».

A su juicio, la culpa la tiene la Alcaldía, ya que otorgó permiso para que se hicieran fiestas cuando en El Morro no hay patrullas policiales, motos ni ambulancias.

«El alcalde es quien sale peor parado porque pagó unas carnavales sin pedir seguridad, es un grave error».

Los hechos

La madrugada de este martes de Carnaval, la población de El Morro, municipio Arismendi en el estado Sucre, se tiñó de sangre, cuando un grupo de hombres encapuchados, vestidos de negro y fuertemente armados, llegaron para sembrar el terror en un centro hípico de la zona y a punta de balazos, acabaron con la vida de al menos 5 personas. 

Fuentes locales revelaron a esta redacción que el móvil tiene que ver con el control del narcotráfico y precisaron que el narcotraficante Vicmar Marín habría ordenado el ataque armado desde la cárcel. Fue detenido hace un mes.

En medio de la desesperación, los habitantes pedían auxilio en una zona donde no hay patrullas policiales ni unidades de ambulancia.

En el sitio, quedaron los cuerpos de al menos cuatro personas y tres heridos que fueron llevados a centros de salud cercanos. Se desconoce su estado de salud, hasta el momento, detalló El Tiempo, medio digital del oriente del país.

Horas después, la Alcaldía del municipio Arismendi -oficialista- emitió un comunicado para lamentar el suceso.

«La Alcaldía Bolivariana del municipio Arismendi, se une al duelo que embarga a familiares, amigos y colectividad de la parroquia El Morro por los lamentables hechos acaecidos la madrugada de hoy martes 21 de febrero», suscribe el texto.

Fueron suspendidas las actividades Carnestolendas en la parroquia Río Caribe y El Morro. «Nos solidarizamos con las instituciones, hacedores de fantasías y comunidad organizada por todo el esfuerzo que realizaron».
 

El alcalde José Guerra, militante del Partido Socialista Unido de Venezuela, no ofreció detalle alguno sobre la investigación o las víctimas.