Con los lapsos muy ajustados para la oposición venezolana, luego de que el Madurismo acomodara, presentara y aprobara un cómodo Cronograma Electoral, la carrera por ganar las elecciones en Venezuela no se detiene.
Lo más inquietante es que pese a las advertencias previas y muy directas de personeros del régimen chavista, con respecto a que si quien ganara las primarias si estaba inhabilitado o inhabilitada no podría inscribirse oficialmente ante el máximo organismo comicial para la contienda del 2024, simplemente se hizo realidad.
Lo preocupante es que como siempre, estando prácticamente a una semana de que el sistema CNE abra para efectuar las postulaciones oficiales de candidaturas, sencillamente no hay un candidato que reciba todo el apoyo en bloque de quienes queremos obtener una victoria contundente y elegir a un nuevo presidente para nuestro país.
En este momento se continúan creando falsas expectativas que nada sano traerán en el futuro inmediato, pues el régimen se regocija al observar el pastel de arroz con mango que tiene la oposición, que dicho sea de paso siempre apela al electorado, a las estructuras, a la capacitación de testigos y un largo etcétera para intentar solo con eso ganar una contienda electoral, lo cual no es suficiente.
Lo primero que se necesita es actuación correcta y precisa de los dirigentes si es que lo son, si no es así no vale nada el esfuerzo.
Como venimos diciendo el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela recibirá postulaciones de candidatos presidenciales del 21 al 25 de marzo de 2024, es decir que solo quedan unos días para definir.
Recién hace aproximadamente 48 horas es que comenzaron a surgir voces alertando que es necesario definir la candidatura, que por supuesto no será la de la señora Machado que con un triunfo en primarias no va a lograr inscribirse.
Muchos lo desean y quieren, pero parece que no conocen luego de 25 años las marramucias del régimen rojo rojito.
Varios analistas en distintos ámbitos, hemos estado indicando, que se hace necesario pensar en un ciudadano que congregue a la mayoría, que no tenga rabo de paja, con las cualidades para ganar y ser un presidente de transición.
No puede ser cualquiera, un candidato que unifique a las diferentes tendencias, que pueda presentar un plan de gobierno viable, que involucre igualmente a todos los sectores, militares y civiles, incluso a sectores descontentos del propio chavismo, una especie de gobierno de amplia base pero con los toques del 2024, de no hacerlo el cambio anhelado no sucederá.
Se tiene que poner el ojo en todo lo que sucede, tanto dentro como fuera de nuestro país, ya se hizo público un informe de inteligencia en los Estados Unidos, que adelanta el posible triunfo de Nicolás Maduro, cosa que pasará si no se activan los mecanismos correctos pero de inmediato.
El tiempo no se detiene y esa conclusión de la que hablamos se maneja bajo la realidad de lo que ocurre u ocurrirá, si no se hace lo conducente.
Siempre lo reseño y lo remarco, para que no se olvide que hay que saber cómo son ellos, no podemos olvidar y cito textualmente, lo dicho por Diosdado Cabello hace un tiempo atrás, el señaló que: “Ni por las buenas, ni por las malas, más nunca volverán a gobernar este país”, agregando que ganaran las próximas elecciones en Venezuela, para un gobierno que se mantendrá vigente en el periodo 2025-2031.
Entonces, para nadie es un secreto que con la cantidad de cosas por las que ha pasado hasta ahora, algo distinto vaya a cambiar en el modo de actuar de esta gente.
En tal sentido, debe buscarse el mejor consenso y conseguir al mejor de todos para enfrentar con la fuerza del pueblo a quienes tienen el país patas arriba desde hace mucho.
Ya voceros de la señora María Corina Machado anunciaron que ella hará lo correcto para el país.
Tal parece que dejará de lado las apetencias personalistas y pensará en el bien común, apartará el pensamiento de que la candidata es ella y presentará a alguien preparado para sustituirla parece ser la vía que tomará muy pronto, sería una decisión políticamente correcta.
Las próximas horas son cruciales, el tiempo es corto para todo lo que hay que hacer, ese nuevo candidato tendrá que recorrer el país, enamorar a la gente, levantar los ánimos y aglutinar a todo aquel que quiera un verdadero cambio para lograr un triunfo aplastante.
Ejemplos en el mundo existen muchos, uno de los que más me han marcado es lo ocurrido en las elecciones de Sudáfrica.
Justamente hace 30 años en 1994, fueron los primeros comicios celebrados en ese país, aplicando el derecho al Sufragio Universal y con eso se logró poner fin al régimen del Apartheid vigente desde 1948.
Cabe destacar que la elección se desarrolló bajo la dirección de una Comisión Electoral Independiente, el ganador fue Nelson Mandela quien obtuvo 12,237,655 de votos, frente a solo 3,983,690 que obtuvo Frederik de Klerk quien era presidente, lo demás es historia.
Aquí de lo que se trata es de ser claros y transparentes, actuar pronto y con valentía, el país lo reclama, así de simple y sencillo.
Reinaldo Aguilera R.
@raguilera68/@AnalisisPE