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    Fiscal Tarek William Saab: Me quitan a mi niña porque denuncié manoseo de trabajador de empresa de juegos

    La madre de una niña de cinco años dio a conocer vía redes sociales la situación de terror que vive después de denunciar un manoseo a su pequeña por parte de un trabajador de una empresa  de juegos cuya sede queda en el centro comercial Orinokia de Puerto Ordaz.

    Le piden al Fiscal General de la República, Tarek William Saab que intervenga y vea todo el cúmulo de atropellos y abusos por ellos atreverse a denunciar al trabajador de una empresa de juegos ubicada en Orinokia Mall.

    Mediante un escrito explica que ella, su esposo y la niña, pasaron de víctimas a castigados porque no sólo fue que el trabajador de la empresa de juegos manoseó a su pequeña, quien por cierto fue sometida a todo tipo de atropellos por parte de la forense del Cicpc, la fiscalía, los funcionarios del Cdmnna y de la policía del estado Bolívar, sino que además le quitaron a la niña y la tienen en una casa de abrigo en Puerto Ordaz.

    Ellos viven en Ciudad Bolívar. Esta pesadilla comenzó el 17 de febrero de este año, cuando viajaron de Ciudad Bolívar a Puerto Ordaz y la pequeña les pidió que la llevaran a los juegos, el parque de juegos que se encuentra en Orinokia Mall y que tiene 10 sucursales en todo el país, donde hay desde juegos con pelotas hasta juegos tecnológicos para los más grandecitos.

    Los padres se resistieron porque a la mamá, Paola Wells, no le gustaba la idea de que la niña se metiera en una piscina de pelotas por  10 dólares que es la tarifa que se cobra por estar durante media hora en  el pelotero. A ella le parecía que estaba muy caro.

    Pero la niña insistió y los padres terminaron accediendo. A la niña le dieron unas medias y un trabajador del pelotero también se estaba colocando unas medias.

    La niña ingresa en el pelotero y se sube al tobogán mientras el trabajador le lanzaba pelotas desde una distancia apropiada, como explicó la madre en su escrito.

    Luego la niña se bajó del tobogán y se fue a la casita que está dentro del pelotero y hacía allá se fue el trabajador del lugar de juegos.

    Como la mamá está pilas le llama la atención la conducta del trabajador y se acerca y comienza a llamar a la niña quien sale de la casita casi llorando, cosa que por supuesto asusta a la mamá quien le pregunta qué ocurre y la niña le dice que el trabajador la tocó en sus partes íntimas.

    Ella interpela al trabajador y él le responde que sólo le hizo cosquillas pero la niña insiste que no, que la tocó en sus partes íntimas.

    Cuando comienza la discusión entre los padres y el trabajador, la encargada del lugar se acerca a saber qué ocurre, pero hace saber que ellos son muy exigentes en la selección de personal. Al conocer la denuncia de la madre, le recomienda que vaya al puesto policial más cercano que es el que queda frente al Aeropuerto de Puerto Ordaz, en Unare.

    Los padres van al puesto policial y hacen la denuncia. El oficial de guardia dice que deben regresar al parque y allí encuentran al trabajador que ya se ha quitado el uniforme y está de civil.

    Se lo llevan a la sede de la PEB donde la niña reitera que ese señor la tocó en sus partes íntimas.

    La policía  y la familia regresan al lugar de juegos para hacer unas fotos y encuentran que el gerente del parque habla telefónicamente con el dueño quien le pregunta al empleado qué fiscal lleva el caso para él hablar.

    El gerente le pregunta al oficial de la PEB y este le dice que vaya a la sede de la PEB en Unare y pida el número.

    Paola  Wells señala que cuando escuchó eso le llamó la atención porque apenas estaban haciendo la denuncia y  el próximo paso era el de la fiscalía pero ella no sabía quién sería el fiscal por eso no entendía como el dueño sí lo sabía.

    Seguramente el dueño preguntó por el nombre del Fiscal Superior del estado, por eso el oficial le dice que lo pida en la comisaría.

    Luego comienza un ruleteo. Los de la PEB Unare la mandan a la PEB de Castillito porque ellos no hacían sumario (pero conocieron el caso completo, ¿Qué tal?)

    A todas estas ya es domingo en la madrugada y andan esos seres, la niña y sus padres en esos menesteres.

    En la PEB de Castillito vuelven a preguntar sobre el caso y la niña repite otra vez qué fue lo qué pasó.

    Los PEB de Castillito dando una demostración de conocimiento de derecho, explican que se trata de un acto lascivo pero que la ley ahora lo denomina Abuso Sexual sin Penetración, que es la situación de la niña.

    Allí les dicen que tienen que ir a la sede de la Senamecf en San Félix en la mañana del domingo  y así lo hacen. Aquí comienza la segunda fase del terror.

    Cuando llegan con el oficial de la PEB que los acompaña y entran a hablar con la doctora Ana Marisol González, de la Senamecf ella precisa que ya conoce la historia.

    (Parece que si hablaron con el Fiscal Superior y éste a su vez puso en autos a toda la cadena de custodia de la situación. ¿Qué tal?)

    Aquí la doctora González muestra su condición humana. Le pregunta a la niña que donde la tocó el trabajador.

    La niña responde y le repregunta: ¿Fue por encima de la ropa? y la niña dice sí. La doctora le dice a la niñita ¿Seguro que nadie más te ha tocado?   La niña responde: NO, sólo el del parque.

    La doctora contesta: Ok, ya vamos a ver.

    Es entonces cuando llega a su máxima expresión la naturaleza de esta doctora, comienza a tocar a la niña bruscamente  delante de los padres que estupefactos no creen lo que ven.

    La niña llora, mamá me está lastimando y la doctora pa’ encima como dicen los campeones del Caribe.

    La manipula con violencia en su zona íntima pero además la niña llora, llora la mamá y la doctora con más  respeto que nunca (por favor lean el sarcasmo) le dice a la madre que la ponga en cuatro porque le van a revisar la zona del ano.

    La mamá no sabe qué hacer y entonces la doctora González (por favor no se les olvide ese apellido)  abre a la niña como un pollo y le dice a su asistente que le busque el celular y le haga las fotos de la zona anal y vaginal, que se vea bien, insistía la doctora casi con desesperación.

    La niña seguía llorando diciendo, mamá me lastima  y claro que la lastimaba porque si fue un abuso sexual sin penetración ¿Por qué debían someter a la niña a esa situación? ¿No hay formas más amables, sobre todo porque es una bebé?

    A todas estas, ¿Qué pensará el propietario de ese parque al ver lo que le han hecho a la niña? ¿Usted no tiene hijas amigo? ¿Para eso fue la llamada al Fiscal Superior?

    Apuesto además que usted debe ser alguien del gobierno, o ser amigo de alguien del  gobierno por el apoyo de todos los funcionarios de los cuerpos de seguridad.

    En su fuero interno deberá admitir que el remedio fue peor que la enfermedad  y si la idea era cuidar la imagen del parque, creo que eso no pasó.

    De aquí en adelante todo fue cuesta abajo en su rodada. La doctora Ana Marisol González,  le pregunta a la niña cuál es el nombre del peluche que carga. La pequeña le dice que es Giselle.

    González le señala que Giselle sabe que ella está mintiendo que diga quien le metió el dedo o el pipi porque si no va a poner presa a su mamá.

    La niña vuelve a repetir que sólo el chico del parque la ha tocado.

    Después de todo esto, la familia puede regresar a Ciudad Bolívar.

    La abuela de la niña trabajó en el Cdmnna y está en shock por todo lo ocurrido.

    Ella recomienda un nuevo examen forense y hablan con el médico quien los recibe en su consulta en la tarde.

    Le hace el examen a la niña, claro sin el método de la doctora González, y les dice que la niña está bien que no ha sufrido abusos de algún tipo pero si les aclara que él no puede hacer un informe porque no está autorizado.

    Al día siguiente regresan a Puerto Ordaz porque a la niña la verá la psicóloga de la Fiscalía, Leogrenis Lezama.

    La abuela de la niña solicita en fiscalía un nuevo examen médico forense y le dan la orden a los padres, y a la abuela.

    La vuelven a llevar al Senamecf y los atiende otra vez la doctora González, quien vuelve a mostrar su condición humana.

    Luego acuden a la fiscalía donde el Fiscal Superior no los recibe porque no está. (La mamá de la niña no consiguió el número telefónico como el dueño del parque).

    Los recibe el Fiscal Décimo Orlando Sánchez quien desde el principio se muestra agresivo con los padres de la niña y hasta amenaza con poner presas a las médicos forenses y a ellos como padres porque la niña presenta un cuadro de abuso.

    El cuadro de abuso existe según el Senamecf pero la niña no presenta trazas de abuso, aunque con tanta revisadera y violencia, al final encontrarán algo, de tanto que a esa muchachita la manosearon estos profesionales de la medicina.

    Al final, dice la madre, en el expediente no hay un documento sobre ese abuso.

    Las psicólogas de Cdmnna le hacen el examen a la niña sin la presencia de la madre porque le aseguran que ella no debe entrar.

    Así pues la niña, el débil jurídico, queda a merced de extrañas porque ella no conoce a esas profesionales de Cdmnna.

    La mamá mete su celular encendido para grabar lo que allí ocurre y cuando las psicólogas se dan cuentan montan en cólera y es cuando toman la decisión de quitarles la niña porque los padres ahora son investigados.

    Nunca conocieron el número del expediente del ministerio público; el manoseador, trabajador del parque de juegos ubicado en el Orinokia Mall quedó bajo régimen de presentación por acoso u hostigamiento; les quitaron a la niña y la dejaron en  una casa de abrigo a pesar de que la Ley de Protección al Niño establece que se puede quedar con un familiar.

    En fin,  el escrito de nueve páginas está en las redes sociales además de un video donde la madre llora y pide al Fiscal General que vea lo que ha ocurrido y los ayude.

    COMUNICADO DE PRENSA

    Habla la empresa

    Mediante un comunicado la empresa Salta Trampoline Park  precisa que desde una cuenta recién creada una persona dice una serie de cosas que crean preocupación entre los usuarios del servicio.

    Dice la empresa que esa persona nunca se ha comunicado con ellos; entregaron el video de seguridad; declararon ante las autoridades y botaron al trabajador que creo el problema.

    Salta Trampoline Park señala que les preocupa que una persona, la mamá de la niña llorando denuncie una situación sin pruebas, ¿Qué tal?

    El comunicado que no tiene firma sino fecha establece que la marca SALTA no tolerará amenazas y extorsiones hacia nuestra empresa.

    1.La marca SALTA Trampoline Park, como respetuosos de la ley no va a promover ni a colaborar en la obstaculización de una investigación penal que busca el interés superior del niño.

    1. La marca SALTA Trampoline Park desconoce cuál es el estatus o resultas de las investigaciones forenses en curso, incluyendo las medidas que pudieron haberse tomado como consecuencia de dichas investigaciones.
    2. La marca SALTA Trampoline Park no tolerará amenazas ni extorsiones hacia nuestra empresa.
    3. La marca SALTA Trampoline Park, prestará cualquier colaboración necesaria para el esclarecimiento del presunto hecho, siempre y cuando prevalezca el interés superior

    del niño. (Es decir para SALTA Trampoline Park, los padres de la niña habrían metido la pata)

    Carmen Carrillo

     

     

     

     

     

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